Jueves 7 de Octubre de 2021
Primero el estallido social y luego la pandemia, truncaron la entrega de los diplomas de licenciado/a en Ciencias Jurídicas de muchos estudiantes que rindieron su examen de grado hasta 2019.
De a poco comienzan a normalizarse los procesos. Esta semana 33 egresados y egresadas de Derecho recibieron sus anhelados diplomas de licenciatura, los que estaban pendientes desde 2019. En tres ceremonias, con aforo reducido y todas las medidas de seguridad sanitaria, los y las jóvenes pudieron cerrar su proceso con la Facultad de Derecho y Humanidades (FACDEH).
En las ceremonias, cuyas imágenes puedes ver en la galería de fotos que se encuentra en la parte superior de esta nota, las autoridades instaron a los y las graduadas a considerar la Facultad, su alma mater, como su casa, y contar con el apoyo de sus profesionales. “Nos sentimos muy orgullosos de ustedes”, les dijo el Decano de la FACDEH, Emilio Oñate Vera, y destacó: “Esperamos que la marca de la Facultad, el sello en la formación que han recibido sientan que los ha preparado para el exigente mundo de la abogacía, el que cada vez más obliga a seguir estudiando, perfeccionándose y especializándose”.
Para el director (i) de la carrera de Derecho y secretario de estudios de la modalidad diurna, Eduardo Figueroa Ávila, “como centralinos, recibir este cartón tiene un simbolismo muy particular, concretar el sueño que se inició cuando entramos a estas aulas. Es un esfuerzo personal y familiar muy grande”. Para el profesor, la entrega del diploma permite “cerrar un ciclo”, a pesar de que “esta carrera se estudia toda la vida”.
“Para nosotros es muy importante mantener vivo el contacto con nuestros egresados. Los invito a que nos vengan a ver, a que estén en contacto con la OASE (...) ustedes como profesionales que van a ejercer en diversos roles” y pueden ayudarnos “retroalimentando constantemente”, les dijo el director de la escuela de Derecho y Trabajo Social, Rafael Pastor Besoain.
Fue una oportunidad también para reconocer el esfuerzo de tres estudiantes que obtuvieron nota siete (7) en sus exámenes de grado: Paulina Díaz, egresó el 2013 y dio su examen en 2019, “fue gratificante, una sorpresa y una alegría” obtener esa calificación; para Alex Flores, de la generación 2014, este logro “guarda relación a la disciplina, con el amor al estudio y a la universidad; reflejó lo que fue todo mi proceso” por la casa de estudios y advirtió que fue especialmente simbólico recibir el diploma de manos del académico Figueroa: “Fue mi profesor de Derecho Civil desde el inicio. He acudido a él cuando lo he necesitado”; Javiera Naudón, egresó el 2018, y si bien se sorprendió de la nota “fue solo perseverancia y buenos interrogadores. Estudié un año -de marzo a noviembre- y el día siguiente fue muy gratificante”. Javiera cumplió su sueño y actualmente trabaja en Tribunales de Familia”.
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