Jueves 23 de Octubre de 2025
La obra del académico de la Famedsa, Juan Francisco Díaz, examina la evidencia científica, ética y comparada que demuestra el aporte de la quiropráctica universitaria a un sistema de salud más seguro, costoefectivo y centrado en las personas.
El libro Más allá del dolor. El valor de la quiropráctica para un sistema de salud seguro y eficiente, del académico Juan Francisco Díaz González, docente del programa de Segundo Título y Licenciatura en Quiropraxia de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud (Famedsa) de la U. Central, abrió un debate sobre la urgencia de regular la quiropráctica como profesión sanitaria en Chile. La obra, publicada por la Editorial Universidad Central de Chile, examina la evidencia científica, histórica y ética que demuestra cómo la atención quiropráctica puede reducir costos, riesgos y dependencia farmacológica, contribuyendo a un sistema de salud más seguro y eficiente.
Su lanzamiento se realizó el jueves 23 de octubre en el Salón Rojo, con la presencia del presidente de la Junta Directiva, doctor Patricio Silva Rojas; el director Emilio Torres Rojas; el contralor Gabriel Peralta Martínez; los socios activos de la Asamblea General Luis Gajardo Ibáñez (Facultad de Educación) y Francisco León Correa (Famedsa); y el director de la Editorial Universidad Central de Chile, José García Oyadenel, junto a miembros del comité editorial, docentes e investigadores.
Participaron como expositores tres profesionales quiroprácticos graduados del Anglo-European College of Chiropractic del Reino Unido: David López Sánchez, Raúl Guíñez Martínez y el propio autor, Juan Francisco Díaz González.
El director del programa de Quiropraxia de la Famedsa, David López, advirtió que «Chile, al igual que muchos países del mundo, enfrenta una enorme carga de enfermedades musculoesqueléticas. De hecho, la primera causa de consulta por dolor en la atención primaria es de origen musculoesquelético». Agregó que, ante el envejecimiento de la población, aumentará la discapacidad y el uso simultáneo de fármacos.
El académico sostuvo que la quiropráctica representa una alternativa costoefectiva y segura: «Los países con mayor desarrollo humano —Noruega, Finlandia, Nueva Zelanda, Alemania, Estados Unidos— cuentan con regulación quiropráctica porque han comprobado su impacto positivo en la calidad de vida y la reducción de cirugías innecesarias». En ese contexto, llamó a «avanzar hacia la formalización de una profesión científica, ética y humana» y recordó que «la U. Central ha formado durante quince años profesionales capaces de liderar ese cambio».
El kinesiólogo y quiropráctico Raúl Guíñez, presidente de la Corporación Chilena de Quiropráctica, definió el libro como «una herramienta pública con antecedentes históricos y científicos indispensables para legisladores y tomadores de decisión». Destacó que la quiropráctica «ha pasado de ser considerada una práctica alternativa a convertirse en una opción terapéutica validada por la evidencia y las políticas de salud pública en numerosos países».
Subrayó que «el vacío normativo chileno compromete la seguridad de las personas», al coexistir profesionales universitarios formados bajo los estándares de la OMS con individuos sin preparación formal. «La regulación no solo protegería a los pacientes —enfatizó—, sino que también dignificaría el ejercicio profesional y fortalecería la colaboración entre la medicina tradicional y las terapias manuales basadas en evidencia».
El autor, Juan Francisco Díaz, sostuvo que Más allá del dolor «no es solo el lanzamiento de un libro, sino una hoja de ruta y un llamado urgente a la acción». Agradeció el respaldo institucional de la U. Central, «cuna de la profesionalización quiropráctica en Chile», y explicó que su investigación «nace de casi veinte años de trabajo en atención primaria, donde los pacientes logran alivio permanente al acceder a la atención quiropráctica».
El académico destacó que «cuando un paciente consulta primero a un cirujano por dolor lumbar, el 42,7 % podría terminar en pabellón; si consulta primero a un quiropráctico, esa cifra cae al 1,5 %». Señaló que Chile vive «una paradoja sanitaria: tenemos profesionales formados con estándares de la OMS, pero sin regulación». Agregó que «la regulación no es un privilegio corporativo, es una obligación ética del Estado» y que el libro «busca ser un manual de política pública sustentado en evidencia internacional y experiencias locales».
La jornada concluyó con las palabras del presidente de la Junta Directiva, doctor Patricio Silva, quien valoró el libro Más allá del dolor como «un aporte sustantivo a la discusión sanitaria nacional» y felicitó a la Editorial Universidad Central de Chile por «fomentar espacios de reflexión que vinculan la investigación, la docencia y las políticas públicas».
El presidente destacó «la importancia de que distintos miembros de la comunidad universitaria se entusiasmen en escribir lo que están pensando, trabajando o soñando, porque solo al publicarlo otros pueden conocerlo». Subrayó que obras como esta «provocan conversación, y de eso se trata: de generar reflexión seria sobre temas que impactan directamente en la salud pública».
Finalmente, resaltó el papel de la academia como espacio de pensamiento libre y plural: «La Universidad Central es un lugar adecuado para discutir sin sesgos, desde distintas miradas, con el único objetivo de acercarse a la verdad». Concluyó felicitando al autor «por colocar sobre la mesa elementos de política, ciencia y evidencia que abren un debate necesario para Chile» e instó a «continuar con la energía y el compromiso que han demostrado durante tantos años».
Con Más allá del dolor, la U. Central reafirma su compromiso con la generación de conocimiento al servicio de la sociedad, el fortalecimiento del pensamiento crítico y la promoción de la investigación aplicada que contribuya al desarrollo de políticas públicas sostenibles en salud.