
El acoso sexual en el trabajo afecta no sólo en sus derechos a quienes trabajan, sino esencialmente en su dignidad. Se produce acoso sexual cuando una persona realiza de manera indebida requerimientos de carácter sexual, sin el consentimiento de la persona requerida, bajo la la amenaza de perjudicar su situación laboral. Las empresas en su reglamento deben contener procedimientos y sanciones a estos hechos.
El 24.7% reconoce haber sido testigo de un acoso sexual en el trabajo y el 66% tiene la creencia que el hombre es más proclive a efectuar este tipo de conductas Miguel Lattz, sociólogo e investigador de Cesop sostiene que "la imagen de masculinización del acoso laboral se instala porque los hombres ocupan un mayor número de puestos de jefatura, lo que visibiliza más la forma como ejercen el poder en sus respectivos empleos, pero no se puede soslayar que también hay jefas acosadoras".
No obstante, como experiencia directa, sólo el 7.3% declara haber sido acosado en su trabajo. El investigador de la U. Central advierte que "la gente tiende a evitar referirse a experiencias personales para no exponerse al juicio de los demás y salvaguardar su privacidad".
Por último, el 87% sostuvo que denunciaría a su jefe por acoso sexual, en las instancias correspondientes. "Hay avances en el empoderamiento de las personas, en cuanto a ser respetadas en sus derechos, lo cual sumado a las nuevas posibilidades creadas para denunciar, constituyen señales positivas para enfrentar este tipo de conductas" concluye Miguel Lattz.