Tribunal Constitucional de Chile selecciona a abogado centralino como nuevo Secretario

Rodrigo Pica llegó el año 1997 a la Universidad Central a estudiar derecho, ingreso con el puntaje más alto, esto le abría un abanico de elecciones en planteles tradicionales; sin embargo, se inclinó por la UCEN ya que señala “ingresaba con beca completa por el primer año, era una de las mejores escuelas de la época, y siendo privada, tenía un gran reconocimiento en el mundo académico”.

Hoy, luego de casi una década de carrera dentro del Tribunal Constitucional y con sólo 36 años de edad, el Tribunal Constitucional de Chile lo ungió como su Secretario, cargo de máxima importancia, donde sus funciones van desde ser ministro de fe hasta validar las actuaciones del tribunal.

Experto en Derecho constitucional, su camino lo comenzó a corta edad ya en la UCEN, cuando en el segundo año de sus estudios comenzó a trabajar como ayudante, y posteriormente, en cuarto ya procuraba, además de haber sido secretario general de su centro de alumnos en tercer año.

Siempre ha destacado la formación de excelencia docente que tuvo. “Cuando yo estudié, mis profesores tenían estudios de posgrado en prestigiosas universidades de Europa y además, eran académicos de los mejores planteles del Consejo de Rectores. Así que la Central no tenía nada que envidiar a ninguna escuela del país”.

El logro que hoy ha obtenido, es el resultado de una larga carrera en el tribunal, donde comenzaría como asistente del ministro, cuando sólo llevaba un año y medio de titulado, tras haberse dedicado a la litigación desde que estaba en cuarto año de sus estudios; no obstante, ya tenía cursos en la Facultad de Derecho de la Central, siendo el profesor más joven de la Escuela en esa época, mientras desempeñaba funciones docentes en otras Universidades. 

Del sello que le impregnó ser alumno de la UCEN, está la diversidad y los caracteres del proyecto educacional con el que contaba. “El alumnado era de una gran calidad, todos con excelentes puntajes, algunos altísimos y, con diversidades ideológicas, políticas, filosóficas y de vida, en un contexto de diversa extracción social y de nutridas actividades extraprogramáticas”.

Siempre recordará el lema de de nuestra casa de estudios en su época de estudiante “vida universitaria activa”. “Contábamos con muchas actividades, pasábamos la mayor parte del día en nuestras facultades y eso nos llevó a querer mucho nuestra Universidad y no alejarnos de ella; es por esto, que aún soy miembro activo como parte de la asamblea y como miembro de la corporación de egresados”.

Este destacado profesional de familia tradicional de abogados, espera poder seguir trabajando por la UCEN y que “sus alumnos sigan en altos cargos y relevantes funciones, como lo logró su generación”, señala.