Viernes 12 de Diciembre de 2014
¿Te enfrentas a pruebas finales, exámenes y presentaciones? La DAVE te entrega algunas estrategias para afrontar este proceso de la mejor forma.
Para la mayoría de los estudiantes la época de exámenes no es un momento agradable, sobre todo cuando hay que prepararse para pruebas con mayor porcentaje. La incertidumbre sobre el nivel de dificultad, las altas expectativas y la presión de fin de año son algunos de los factores que te pueden llevar a sentir una serie de reacciones emocionales negativas, como estrés y ansiedad.
Niveles adecuados de ambos pueden influir en lograr un buen desempeño, sin embargo cuando estos se elevan demasiado pueden tener el efecto contrario e incluso llegar a interferir negativamente en tu vida.
Es por esto que, desde la DAVE, te presentamos algunas estrategias que podrían ser útiles para afrontar de mejor forma la ansiedad ante las evaluaciones:
Mientras estudias:
1. Busca el equilibrio entre estudio y descanso que más se acomode a tu estilo de trabajo y respeta ese tiempo (no te pases, ni te lo saltes). Ve a otra habitación o sal a dar una vuelta, la idea es que no pienses en el estudio durante el descanso.
2. Estudiar con un compañero que comparta tu ritmo de estudio puede ser beneficioso para ambos. El intercambio de ideas, conversar y bromear, los hará sentirse acompañados por alguien que está pasando por lo mismo.
3. Evita, disminuye o reemplaza los desacertados hábitos que normalmente relacionamos con estudiar, y que más que ayudar pueden perjudicar tu estudio, como el café, el tabaco y el exceso de comida.
4. Si estudias apurado o contra el tiempo, te será más difícil obtener un buen rendimiento en la prueba. En cambio si te preparas con anticipación fijándote metas a corto y mediano plazo, y llevas la materia al día, te evitarás la frustración de una mala nota y de un innecesario agotamiento físico y mental.
5. Asigna el tiempo necesario de estudio para preparar todas las cosas que necesites antes de la evaluación, como por ejemplo: leer tus apuntes, revisar el material de estudio, hacer esquemas, repasar lo estudiado, entre otros.
6. Aumenta la confianza en ti mismo, revisando frecuentemente el material de estudio.