Un periodista puede trabajar en distintos espacios donde se requiera un profesional de la comunicación e información, porque es capaz de elaborar contenidos en diferentes lenguajes y plataformas. Sus fuentes laborales se asocian habitualmente a los medios de comunicación tradicionales; como diarios, revistas, radio y televisión. No obstante, puede desempeñarse en organizaciones que requieran equipos de comunicadores (empresas de comunicaciones, municipalidades, ministerios, servicios públicos, empresas públicas o privadas, organismos internacionales, organizaciones no gubernamentales, asociaciones gremiales, entre otras) y en nuevos medios digitales, desarrollando contenidos para portales y sitios de internet.