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Martes 5 de Mayo de 2015

Salida a la Crisis

Opinión del profesor de la Escuela de Administración Pública Ignacio Cienfuegos publicada en el diario El Pingüino de Punta Arenas.

Imagen foto_00000001Señor Director:

A propósito de los controvertidos y graves hechos que han debilitado aún más la credibilidad de las instituciones políticas en nuestro país, la clase política vuelve a recurrir a aquel concepto ampliamente usado durante los últimos veinticinco años: la “gobernabilidad”. Se pretende, entonces, navegar las turbulentas aguas del conflicto y desconfianza de una ciudadanía indignada, apelando al consenso institucional como mecanismo imprescindible para encauzar las tensiones sociales. Es así como creo conveniente dar cuenta del origen, propósito y contexto en que el reconocimiento de la gobernabilidad surge como modelo. Ubicado su eje teórico en el institucionalismo, la gobernabilidad asume que los países logran un sostenido bienestar y desarrollo cuando cuentan con reglas del juego claras y permanentes, así como capacidades para hacerlas cumplir. En este sentido, tanto normas informales (tradiciones, códigos de conducta éticos, entre otros) como formales (leyes, regulaciones y organizaciones, por ejemplo), contribuirían a disminuir la incertidumbre en la interacción humana en la sociedad.En términos de su aplicación e intereses asociados, la gobernabilidad ha sido interpretada de distintas maneras. Nace a partir de la “Comisión Trilateral” a mediados de los 70, como respuesta de sectores económicos trasnacionales de países desarrollados a la situación de “ingobernabilidad y despilfarrado en la construcción del Estado de bienestar”. El diagnóstico realizado por aquella instancia –liderada por David Rockefeller– sitúa como causas de la crisis la expansión democrática por mayor participación y las respuestas desbalanceadas del Estado, las que habrían generado tendencias inflacionarias, disgregación de intereses, sobreideologización y fragmentación del sistema político. De esta manera, la gobernabilidad –en sus orígenes al menos– se plantea como modelo para encauzar el conflicto social y la generación de consensos imprescindibles para alinear a Europa en el desarrollo del capitalismo moderno.

Ignacio Cienfuegos Spikin
Académico de la Escuela de Administración Pública, Universidad Central de Chile
PhD Universiteit Twente, Holanda

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Fuentehttp://elpinguino.com