El Instituto Internacional de Educación Infantil (IIDEI) de la Facultad de Ciencias de la Educación realizó el seminario "Los primeros centros educativos para párvulos en América Latina: iniciativas del sector público en el siglo XIX ¿en qué y cuánto hemos avanzado?", con el que quiso celebrar los 148 años de la educación parvularia chilena, a través de la presentación de una investigación histórica sobre cómo se originaron los primeros jardines infantiles en Chile y Bolivia.
Al evento, patrocinado por los comités Chileno y Boliviano de la Organización Mundial de Educación Preescolar (Omep) y el Museo Gabriela Mistral de la Dibam, asistieron la directora de la Unidad de Educación Parvularia del Ministerio de Educación, Alicia Berríos; la vicepresidenta de la Junta Nacional de Jardines Infantiles, María Francisca Correa; la directora de la Región Metropolitana de la Fundación Integra, Marcela Fontecilla, entre otras personalidades del ámbito, además de académicos y estudiantes de nuestra universidad y otras casas de estudios.
La primera parte del seminario contó con la presentación del doctor Jaime Caiceo, quien hizo una reseña del contexto histórico, político y educacional de Chile a mitad del siglo XIX. Posteriormente, la directora del IIDEI, María Victoria Peralta, expuso sobre cómo se instalaron los primeros centros educativos públicos para párvulos, hace casi 150 años, y la influencia que tuvo la educación francesa, que propició las primeras experiencias en Bolivia el año 1855 y en Chile en 1864. "En nuestro país, los primeros jardines infantiles se inspiraron en las 'salles de asile' de Francia y tuvieron como grandes promotoras y fundadoras de la educación infantil a las hermanas de caridad, venidas de ese mismo país", comentó la doctora Peralta.
Su charla estuvo basada en el sexto volumen de la serie de historia de la educación infantil "Los primeros centros educativos para párvulos en Latinoamérica. Segunda parte: Los casos de Chile y Bolivia en el siglo XIX", libro de su autoría que fue presentado en la ocasión, donde se demuestra y realza la antigüedad de la educación infantil en nuestro país. "Esto quiere decir que hace casi 150 años en Chile hubo hombres y mujeres que entendieron que el niño tenía derecho a jugar, a divertirse, a compartir con otros en un lugar que los acogiera para educarlos, hecho que muchos creen que ocurrió recién hace 30 o 40 años", señaló.
Asimismo, con objetivo de debatir sobre la proyección que hoy tiene el aporte del sector público en los desafíos actuales de la educación infantil chilena y latinoamericana, el seminario finalizó con un panel que contó con las intervenciones de Daniela Eroles, de la oficina regional para América Latina de Unesco; Verónica Romo, vicepresidenta del Comité Chileno de Omep, Alicia Berríos, María Francisca Correa y Marcela Fontecilla.