Sumándose a las celebraciones por los 30 años de la Universidad Central de Chile, el programa China es Central de nuestra casa de estudios, junto a la Dirección de Comunicaciones Corporativas y la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas, trajeron hasta el campus Almagro Norte toda la magia del gigante asiático, a través de las danzas del león y el dragón, que simbolizan buenos augurios.
El espectáculo estuvo a cargo de la Federación Chilena de Danzas Tradicionales Chinas y concitó el interés de estudiantes, académicos, directivos y funcionarios, quienes, apostados en los puentes que conectan las torres del campus, asomados por las ventanas y presentes en el patio central, disfrutaron de media hora de una colorida presentación al son de tambores y gongs orientales.
La agrupación artística compuesta por más de veinte bailarines, los que además fueron acompañados por estudiantes de chino mandarín del programa China es Central, ejecutaron, primeramente, “La Danza del León del Norte”, que representa destrezas y habilidades, emulando los movimientos del león con grandes saltos, con los cuales éste último obedece las órdenes de su domador, un experto acróbata. Entre ambos realizaron una serie de movimientos coordinados que sorprendieron a la concurrencia.
Luego fue el turno de “La Danza del Dragón”, que simboliza vientos favorables y lluvias oportunas y beneficiosas, toda vez que, de acuerdo con la tradición china, el dragón tiene el poder de prever el lugar y la intensidad de la lluvia, razón por la cual este baile se ejecuta en los comienzos de nuevas etapas, ya que su baile serpenteante ahuyenta los malos espíritus y atrae las buenas cosechas.
La presentación finalizó con “La Danza del León del Sur”, que representa la conexión entre el mundo de los cielos y la tierra, su espíritu, valor, fuerza e inteligencia. Su baile ritual tiene por objeto ahuyentar los malos espíritus y limpiar las malas energías del lugar, atraer la prosperidad y la buena fortuna.
Diestros acróbatas dieron vida a leones gigantescos, que mostraron sus destrezas sobre pilotes de más de dos metros de altura y terminaron recorriendo el campus, colándose entre el público que coronó la fiesta con un largo y gran aplauso.
